Este fue un caso clínico publicado en [Kidney 360](https://journals.lww.com/kidney360/Fulltext/2020/03000/Unusual_Cause_for_Continuous_Renal_Replacement.13.aspx): Paciente de 54 años presentó un cuadro de TEP masivo, siendo tratada con trombólisis y trombectomía, pero evolucionó con paro cardíaco, necesidad de intubación orotraqueal, vasopresores y soporte de oxigenación mediante membrana de oxigenación extracorpórea (ECMO). Desarrolló IRA que requirió inicio de TRS continua.

Ante esta situación, la paciente fue sometida a una sedación prolongada con propofol y, en el día 15 de su hospitalización, desarrolló coágulos recurrentes en la CVVHDF, a pesar de recibir anticoagulación regional con citrato.

Se observó una sustancia lipídica en el circuito que causaba obstrucción en el sistema de diálisis y en los circuitos de la membrana de oxigenación extracorpórea (ver figura).

Los análisis de laboratorio mostraron un empeoramiento de la acidosis metabólica con niveles normales de ácido láctico, lo que llevó a considerar la hipótesis de una **síndrome de infusión de propofol**. Se realizaron análisis de los niveles de triglicéridos séricos, los cuales se encontraron elevados, con un valor de 1132 mg/dl (72 mg/dl en la admisión).

La infusión de propofol se interrumpió de inmediato, lo que resultó en una disminución de los niveles de triglicéridos a 850 mg/dl y la resolución del cuadro de coagulación o acumulación de material lipídico.

La síndrome de infusión de propofol es una complicación rara pero potencialmente mortal, típicamente asociada con la infusión de dosis elevadas (>67 μg/kg por minuto) durante más de 48 horas.

Sin embargo, como en este caso, la toxicidad también ha sido reportada con dosis más bajas administradas durante un período prolongado.

Los factores de riesgo adicionales incluyen:

- Enfermedad crítica.

- Uso de vasopresores.

- Lesión hepática grave.

Las características típicas incluyen acidosis metabólica sin causa aparente, hipercalemia, hipertrigliceridemia y arritmias cardíacas.

El propofol es una emulsión lipídica, y dosis excesivas de esta emulsión lipídica no se hidrolizan en el plasma, lo que lleva a niveles elevados de triglicéridos.